viernes, 25 de marzo de 2022

LA ESTACIÓN DE LA ENSENADA EN EL FERROCARRIL DE AREQUIPA A MOLLENDO

 

El ferrocarril de Arequipa a Mollendo se inauguró el 1 de enero de 1871, con una ceremonia en el “Puerto Bravo” y  faustuosa fiesta en la ciudad de Arequipa; para tal magno hecho, se realizó el viaje inaugural en una caravana conformada por seis locomotoras con sus respectivos coches; cada una de ellas tenía un nombre: El Conquistador, Tambo, Mejía, Inca, Arequipa y La Mollendina; en esta última viajaba el presidente del Perú Coronel José Balta, acompañado de “newyorkino” Henry Meiggs, artífice de esta obra ferroviaria.

En principio el trazo de este ferrocarril tuvo nueve estaciones cuya función principal fue de abastecer de agua a las locomotoras y de servicio de carga y pasajeros hacia la “Ciudad Blanca” o al puerto de Mollendo. Estas estaciones ferroviarias fueron: Mollendo, Mejía, Chauintala, Chachendo, Vitor, Kishuarani, Uchumayo, Tio y Arequipa; así se puede leer en el informe que elaboraron los ingenieros Federico Blume y Manuel Echegaray en 1860, cuando aún el proyecto original era extender los rieles hasta el desaparecido puerto de Islay; sin embargo, posteriormente se construyeron otras cuatro estaciones:   La Ensenada Pozco y Huagri.

En torno a las estaciones se desarrollaron actividades comerciales y de estancia para los viajeros, la estación de La Ensenada cumplió esta función principalmente para los pobladores del valle de Tambo. Información más antigua sobre esta estación la encontramos entorno a la guerra con Chile en 1980 En la madrugada del 10 de marzo la caballería del Teniente chileno Belizario Amor, y la columna “Zapadores” se dirigieron hacia Mejía, siguiendo la línea del ferrocarril, llegando a la 1 de la tarde, donde encontraron a dos italianos que cuidaban sus caramancheles. Allí saquearon e incendiaron las casas desocupadas, destruyeron la enrieladura y vagones que se encontraban en la estación de La Ensenada” (Eguiluz. 2016).  

El profesor Lino Benavente Lazo escribió un artículo para la revista La Punta sobre esta antigua estación y nos recuerda que tuvo su época de auge y vigencia cuando los tambeños viajaban a Mollendo o hacia a Arequipa se hacía por este ferrocarril “Hubo época en la que el viaje a ella se hacía a lomo de bestia, pero de caballos que valía la pena montar, luego con la aparición de los vehículos motorizados, este se hacía en “góndola” (bus) o camiones. Don Rómulo Pacheco [desde Punta de Bombón], tan tranquilo y bonachón, fue el pionero en poner una góndola al servicio del viajero” (BENAVENTE. 1990).   

Benavente entrevistó con la señora Senobia Salazar, antigua vecina de la estación de La Ensenada, quien afirma que “los trenes de pasajeros pasaban dos veces al día; a las 12 m. con pasajeros del distrito del distrito que se dirigían a La Punta, Bombón, Catas y La Pampilla, y el de las 2 p.m. de regreso a Mollendo el que llegaba a la ciudad de Arequipa a las 7 pm. El pasaje costaba S/. 7.50 en primera y S/. 3.50 en segunda; y a Mejía valía S/. 0.25. La Ensenada contaba con telégrafo, teléfono, correo, cine, templo y agua potable que venía desde Arequipa por cañería al pie del ferrocarril. Tenía una escuelita dirigida por la sacrificada maestra señorita Rosa Elvira Butrón Fernández. Don Justo Ponce fue el notable vecino que doto de luz eléctrica a La Ensenada. Hubo dos picanterías, cuyos sabrosos platos eran el deleite de los viajeros, no faltando el vaso de chicha de buena jora; el menú era amenizado con sendas vitrolas de cuerda y bocina que llenaban el ambiente con música en boga” (BENAVENTE. 1990).             

Benavente termina su artículo haciendo la siguiente precisión “Las irrigaciones Ensenada, Mejía, Mollendo y últimamente de La Iberia dedicadas a la producción de panllevar y forrajeras para la alimentación de ganado lechero es el único reglón de producción de este hermoso lugar, que por muchas décadas fue la puerta de ingreso al valle de Tambo” (BENAVENTE. Ibíd.).

LOS FERROCARRILES DE TROCHA ANGOSTA HACIA LA ESTACIÓN DE LA ENSENADA

La estación de La Ensenada se convirtió en un centro de convergencia de los ferrocarriles de trocha angosta de las haciendas de Pampa Blanca y Chucarapi donde llegaban cargados de azúcar y otros productos de dichas haciendas para transportarlos a los vagones del Ferrocarril del Sur y trasladar los productos hacia Arequipa y Bolivia.    

En 1905 llegó a la estación de La Ensenada los trenes de trocha angosta de la hacienda Pampa Blanca de Víctor Lira y en 1912 el tren de la hacienda Chucarapi de Eduardo López de Romaña.

El pequeño ferrocarril de Pampa Blanca atravesó el río Tambo en el km 18 mediante un puente de acero de grandes mallas de tres tramos y 80 metros de luz; Víctor Lira compro de Justo Ponce, el 23 de agosto de 1906, terrenos en la Ensenada y “una casita que queda a la derecha del camino que va a La Punta y el extremo del sitio donde estuvo situado el triángulo de la empresa de los ferrocarriles del sur” (ARA. 1906)). Esta propiedad le sirvió de almacén de azúcar y subproductos

El ferrocarril de la hacienda Chucarapi se construyó paralelo al de Pampa Blanca, partía de la estación de La Ensenada al ingenio de Chucarapi pasando por los siguientes paraderos: Boquerón, La Curva, Arenal, Santo Domingo, Cocachacra, Chucarapi y de allí a Cocotea o Valle Arriba; Francisco Sivirichi en 1932 escribió lo siguiente: “este ferrocarril cuenta con suficiente número de locomotoras y carros que satisfacen las exigencias del tráfico, posee una factoría bien montada  en el ingenio de Chucarapi donde se ejecutan a celeridad. Esta línea tiene dos puentes importantes uno en el km 18 de acero de grandes mallas sistema alemán y otro en el km 24 de 97 metros de luz, es de acero igual que el anterior; los dos sobre el río Tambo” (SIVIRICHI. 1932).

EL PUEBLO DE LA ENSENADA

La ensenada se convirtió en un pequeño pueblo, según Francisco Sivirichi,  con una escuela, capilla, hotel, oficina de correros y telégrafo, teléfono, cinema, fábrica de gaseosas y velas 

El profesor Lino Benavente Lazo nos dice que los vecinos notables de La Ensenada fueron Honorio Portilla, Luis Salazar, Helbert Salazar, Juan Holguín, Alberto Puertolas excelente olivicultor y Juan Cuadros criador de caballos de paso.       

La llegada del tren a la estación de la Ensenada era motivo de alegría, allí se compraban alfajores, mazos de caña y chancaca, tortillas de camarón, alfeñiques, miel de caña, etc.; el viajero tenía que llevar obligadamente estos productos tambeños a Arequipa, donde arribaba orgulloso después de saborear un chupe de camarones o un plato de locro en Vítor, o de sufrir mareos en Qusihuarani.

El tambeño era un viajero característico, algunos usaban por primera vez terno y zapatos y subían al tren cargados de saquillos de zapallos, camotes, caña, ají, y oros productos.

EL VIAJE DESDE LA PUNTA DE BOMBÓN

La estación de la Ensenada era el punto de concentración de los pobladores de Punta de Bombón para viajar hacia Arequipa pues esta estación se ubica a 5 km. del distrito, para llegar a la estación se salía del pueblo de La Punta por “El Crucero” en dirección hacia La Curva (por la plaza actual), luego ascendían el cerro Guardiola hacia la estación.

Posteriormente al entrar en funcionamiento el ferrocarril de trocha angosta de la hacienda Pampa Blanca y Chucarapi se hizo uso de los coches desde el paradero de Guardiola para abordar estos pequeños trenes hacia la estación de La Ensenada, es así que lo punteños aprovecharon las pequeñas locomotoras para llegar a la Ensenada desde Guardiola (La Curva). Actualmente la estación de La Ensenada no existe, la zona se ha convertido en ganadera y agrícola con la irrigación establecida desde la década de 1940.  

BIBLIOGRAFÍA

BENAVENTE LAZO, Lino. La Estación de La Ensenada. En revista La Punta N° 23. Arequipa 1990. 

EGUILUZ MENENDEZ, Percy. Una fortuna sobre el azúcar. En: Revista Cocachacra. N° 1. Arequipa 2017 

 SIVIRICHI, Francisco. Monografía de la provincia de Islay. Mollendo 1932.

Locomotora número 1 del Ferrocarril del Sur estacionado en La Ensenada a la espera de pasajeros.  Fotografía diario El Deber 1930. 


Vagones y enrieladura de la estación de La Ensenada antes de ser desmantelada. Fotografía revista La Punta, 1990. 


Vagones y enrieladura de la estación de La Ensenada antes de ser desmantelada. Fotografía revista La Punta, 1990. 


Coche del ferrocarril de trocha angosta de la hacienda Pampa Blanca y pasajeros en la estación de La Ensenada en la década de 1930. Fotografía Revista Cocachacra. 


Antiguo hotel de la estación de La Ensenada

Antiguo hotel de la estación de La Ensenada

Antiguo hotel de la estación de La Ensenada

Habitaciones laterales del hotel de la estación de La Ensenada


Detalle  en fierro forjado debajo del antiguo hotel de la estación de La Ensenada, se lee las iniciales SP. El hotel perteneció a la familia Ponce.

Habitación lateral del antiguo hotel de la estación de La Ensenada que se mantiene en pie. Fotografía Percy Eguiluz 2021. 

Antigua escuela en la estación de La Ensenada, fue declarada Monumento Histórico junto a los otros edificios de la estación. Fotografía Juan Roberto Mau García.


 Dos fotografías del edificio en madera de la antigua escuela en la estación de la ensenada. Fotografía Percy Eguiluz 2021

 Dos fotografías del edificio en madera de la antigua escuela en la estación de la ensenada. Fotografía Percy Eguiluz 2021

Antigua calle principal de la estación de La Ensenada. Fotografía Percy Eguiluz 2021.


Oficinas de la antigua estación de La Ensenada. Fotografía Percy Eguiluz 2021

Oficinas de la antigua estación de La Ensenada. Fotografía Percy Eguiluz 2021

Bases de cemento del tanque de agua para las locomotoras en la estación de La Ensenada. Fotografía Percy Eguiluz 2021. 

El trazo del Ferrocarril del Sur hacia Mollendo ahora convertido en una carretera

El trazo del Ferrocarril del Sur hacia Mollendo ahora convertido en una carretera